Cheesebridge (Puentequeso) es una elegante ciudad de la era posvictorinana, obsesionada por el dinero, la clase y el más delicioso de los quesos apestosos. Debajo de sus encantadoras calles adoquinadas viven los Boxtrolls, unos monstruos que salen de las alcantarillas por la noche para hacerse con los bienes más preciados de los habitantes: sus hijos y sus quesos.
Porqué ir a ver a los Boxtrolls:
1.- Está hecha con amor; al conversar con Ben Kingsley, quien
le pone la voz a uno de los
personajes en la versión original, y dejó una frase con mucho de
subjetivo: “Los Boxtrolls es una película hecha con amor”. Que la frase sea subjetiva no significa que esté lejos de la verdad. Los Boxtrolls
es una obra cuidada en forma y fondo, un esfuerzo colectivo que deja
notar el cariño involucrado en el proceso, lo que no suele notarse en la
mayoría de películas.
2.- El diseño de los personajes es simplemente una obra de arte a todo dar; gran riesgo de Laika y los realizadores a la hora de hacer de los
Boxtrolls unos monstruos carentes de belleza –sumado a su capacidad de
comunicarse con palabras- y aun así conseguir despertar empatía en el
espectador, haciendo hincapié sobre la idea de las apariencias engañosas
y prejuicios pero sin machacarlo verbalmente con moralejas y frases
redundantes, lugar común en cintas similares. No parece casualidad
además que el mismo nivel de monstruosidad también se pueda apreciar en
los personajes adultos.
3.-Si pensabas que esta hecha solo para un público infantil te equivocas; los Boxtrolls es una película cuyo ritmo y estilo parecen
destinados a conquistar al público infantil, sin embargo se reserva
algunos momentos sumamente inquietantes y que dejan ver que encasillarla
como obra infantil está totalmente fuera de lugar. El abandono, los
conflictos de poder y el miedo a lo que no se entiende son tópicos
adultos que forman parte de una historia que deja espacio tanto a
pasajes celebratorios como a instantes que parecen sacados de alguna
cinta de terror.
4.- Y por ultimo y no menos importante, la escenas que conmueven que ya siempre se están incorporando en las películas animadas; y no me re